me pierdo en el bosque y me acerco a mí.
respiro el silencio.
a veces siento el viento, a veces soy viento.
me alejo del ruido y me acerco a mí.
vuelvo, siempre vuelvo.
en busca de un poco de piel.
cada vez menos.
el camino de mi verdad es solitario, rudo.
a veces estoy sola y a veces
soy soledad humeante de recuerdos.
me pregunto, en compañía del bosque,
cómo serán esos caminos para los demás.
¿hay verdad para ellos?
¿piensan tanto como yo?
¿se desgarran las entrañas como yo?
¿quién soy yo?
a quién le importa, responde a veces el bosque.
su voz es de terciopelo, su aliento musgo mojado.
me calma.
a nadie le importa.
soy libre.
tan libre que me asusto y quiero volver a la prisión.
demasiado tarde.
mi verdad es así y aunque quisiera sacudírmela, la camino.
todavía me giro de vez en cuando hacia atrás,
por si acaso me perdí algo.
cada vez menos.
miro al bosque y me mira.
me alejo de todo y me acerco a mí.
es silencio esto que suena a mi alrededor, al fin lo oigo todo.
poesía en el viento, en las hojas.
soy viento y soy hojas.
me fundo con el bosque.
a lo lejos campanas que anuncian la primavera.
renacer.
es el momento.